miércoles, 16 de septiembre de 2009

A propósito de Camisea

A propósito de los últimos comentarios vertidos en relación al tema Camisea, quiero hacer un agregado a mis artículos publicados el 08 y 26 de marzo en el diario Correo.

Artículo 1

Camisea

En las últimas semanas ha habido un debate sobre el futuro del gas en el Perú. La preocupación que plantea este debate es que la demanda interna del gas crece rápidamente; por consiguiente, se dice, no habría suficiente en unos años para atender la demanda interna y el contrato de exportación ya firmado.

Todo debate es saludable, sobre todo si las motivaciones de sus promotores son sanas, buscando un país más próspero y sólido. Lamentablemente, algunos de los actores del debate actual están motivados por razones políticas. En las últimas semanas ha habido una verdadera andanada, sin argumentos válidos, contra Alejandro Toledo y varios de sus ministros. La reacción de indignación del ex presidente está plenamente justificada. Los supuestos acusadores en algún momento deberán explicar sus verdaderas motivaciones.

La verdad es que Camisea es la obra de varios gobiernos: Fujimori (bajo quien se inició la licitación después de que cayó el proyecto de Shell), Paniagua (cuyo Ministro de Energía firmó el contrato original), Toledo (cuya estabilidad económica motivó a los miembros del consorcio ganador a invertir varios miles de millones en el proyecto), y García (bajo cuyo gobierno se organizó la financiación del proyecto de exportación de gas y se dio inicio al planeamiento de una industria petroquímica). Es muy probable que en cada etapa se opine hoy, retrospectivamente, que se hubiera podido hacer las cosas mejor. Por ejemplo, ¿quién hubiera pensado en 2002, cuando se inició el proyecto, que el Perú iba a crecer a un promedio de casi 7% anual en el lapso 2002-2008 y que por consiguiente la demanda interna de gas sería lo que es hoy? ¿Quién hubiera pensado que el petróleo se iría de $15 por barril en 2002 a $150 a mediados de 2008, para luego caer a $35 hoy, con resultantes variaciones agudas en el precio internacional del gas? Errores de apreciación, ciertamente, aunque todo el mundo los cometió. ¿Faltas penales o constitucionales? ¡Vamos, vamos, no se pasen!

Al grano. El Perú tiene suficientes reservas probadas de gas (14 TCF) para atender la demanda interna y el contrato de exportación ya firmado. Hay por lo menos cuatro lotes de exploración de gas con buen potencial, aunque las empresas involucradas obviamente no pueden hacer anuncios antes de haber plenamente confirmado hallazgos concretos.

Vamos ahora al lado de la demanda. En 2003, cuando aún no se había iniciado la operación de Camisea y no se veía claramente la demanda (el tubo empezó con poco uso de su capacidad), se promovió un precio bajo del gas para el uso interno, principalmente para generación eléctrica. Este precio se reconfirmó por varios años a principios del actual gobierno, para mantener tarifas eléctricas económicas. Pero al mismo tiempo, el precio bajo del gas ha hecho que las generadoras eléctricas, con el gas barato, lo usen abundantemente en vez de invertir en equipos más costosos, pero más eficientes, de “ciclo combinado” en los cuales se consigue más electricidad por unidad de gas consumido. De allí viene una parte del aumento de la demanda interna. Este problema está en vías de resolución en el Ministerio de Energía y Minas.

Como en todos los temas económicos, la solución viene por atacar los dos lados del problema: la oferta (la exploración), y la demanda (precios bajos y por consiguiente uso ineficiente de un recurso agotable). La solución no viene por satanizar a los gobiernos anteriores y tirarle piedras a fantasmas.

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Celso Pastor de la Torre. Nos ha dejado a los 94 años de edad un buen amigo y muy destacado representante del Perú en el exterior. Hidalgo caballero, fue dos veces embajador de la democracia en Washington. La vida lo golpeó pero nunca perdió el buen humor y siempre fue leal a sus amigos y a sus ideales democráticos. Trabajamos juntos a partir de los años ’60, a veces para defender causas difíciles, pero sobre todo quiero recordar que fue un promotor pionero de que se conozca la cultura artística del Perú en Estados Unidos. Celso, te echamos mucho de menos.

Artículo 2

Gas y Política Energética

En medio de las andanadas, bloqueos y demandas a veces poco racionales, ha surgido otro debate, el del futuro energético del Perú. Es saludable que este tema se evalúe y se discuta públicamente. Pero la discusión en este momento está dominada por declaraciones alarmistas en el sentido de que las reservas de gas serían mucho menores de lo previamente anunciado y que pronto vendrían “apagones” y cortes de luz.

Como a veces ocurre con rumores alarmistas, es cierto que hay una verdad en algunas de estas afirmaciones: el rápido crecimiento económico de los últimos años ha generado una demanda eléctrica (30% abastecida por centrales a gas) mucho mayor que la que estaba proyectada. Pero la afirmación que un nuevo estudio de las reservas de gas muestra que son 8.8 trillones (norteamericanos) de pies cúbicos en vez de 11 a 14 trillones es una distorsión falsa.

Basta con ir al portal del Ministerio de Energía y Minas (http://www.minem.gob.pe/) y ver el reciente estudio en cuestión. Este se refiere a dos lotes: el lote 88 (el que hoy abastece Lima y por un tiempo abastecerá el proyecto de exportación de Repsol y Hunt a México) y el 56, el lote más reciente. El estudio del 88 aclara en su segunda página que “los volúmenes de reservas de gas están basados en contratos firmes de venta de gas… y otros aún en proceso de negociación”, y luego da la lista estos contratos, incluyendo algunos todavía no firmados, hasta por un total de 8.7 trillones, incluyendo varios consumos proyectados hasta el año 2040. Para el lote 56, el “mejor estimado” es de 2.7 trillones, después de reducir 26% por reservas difíciles de recuperar. La suma de los dos lotes es 11.7 trillones, no 8.8 como han dicho algunos comentaristas. Esta suma es bastante conservadora, después de varios descuentos, y no incluye otras reservas nacionales menores en la costa norte y Aguaytía. Tampoco mencionan los comentaristas que hay programas futuros de exploración en los lotes 57 (Repsol), 58 (Petrobras), y Hunt (56), todos ellos en la misma zona geológica de Camisea, la cual es promisoria.

Hoy hay dos verdaderos problemas importantes: uno, la recesión mundial que ha hecho colapsar los precios del gas en Estados Unidos y otros mercados y por consiguiente ha frenado la exploración; y dos, los bajos precios “de introducción” del gas que se dieron para la generación eléctrica en el mercado nacional. Ahora tendrá que venir un período de reajustes progresivos para que las generadoras inviertan en sistemas de “ciclo combinado” que permiten utilizar menos gas por unidad de electricidad producida. Aún con los precios internacionales extremadamente bajos de hoy, el precio de exportación del gas (si se realizara ahora) es bastante mayor que el precio interno para la generación eléctrica.

La recesión mundial pasará, si no es a fines de este año, probablemente en el año 2010. El reto entonces será el de planificar una política energética coherente a mediano y largo plazo. El Perú tiene un potencial hidroeléctrico de más de 50.000 MW, del cual utilizamos menos de 4.000 MW. Es energía limpia, no contaminante, pero con importantes costos de inversión y necesidades de planificación social y regional en la Sierra y la Amazonía. No hemos ni empezado a rasguñar ese potencial: por ejemplo, sólo la zona cercana al Pongo de Manseriche tiene un potencial de más de 8.000 MW, según un entendido en la materia, el Ing. Alfonso Rizo Patrón, ex Ministro de Fomento y muy alerta a sus más de 90 años de edad.

Una planificación energética no funciona si los precios no reflejan la potencial escasez. Es evidente que necesitamos subsidios a las tarifas eléctricas a los más pobres, que representan la mayoría de la población. El mecanismo de subsidio cruzado se puso en marcha en setiembre 2001, promovido en la legislatura cuando este autor era Ministro de Economía. Para los otros consumidores, que representan el 90% del consumo, los precios tienen que ser realistas. Es la única forma de promover la inversión en generación, transmisión y distribución. Así se evitarán apagones futuros. Los apagones no serán en unos días como pretenden los alarmistas.



Adendas:

1. La exportación no ha empezado. Esta suepuestamente empezará en el 2011, pero si persisten los bajísimos precios en el mercado (USA/México), donde hay actualmente una abundacia de gas, es posible que no haya esportación hasta que mejoren los precios.

2. Hay varios grupos explorando en la zona de Camisea (Repsol, Petrobas y otros) con indicios promisorios aunque estos no se contabilizan en las reservas. Si mejoran los precios, habrá más expolaración.

lunes, 7 de septiembre de 2009

La peor guerra y no la peor recesión

Esta semana fue el 70º aniversario del inicio de la Segunda Guerra Mundial, la peor guerra de la historia, cuyas consecuencias persisten hasta el día de hoy. Más de 50 millones de muertos, incluyendo la masacre de 6 millones de judíos y más de 25 millones de muertos en Rusia. El 1 de setiembre de 1939, 60 divisiones (o sea un millón de hombres) invadieron Polonia y la hicieron leña. Nada de esto hubiera ocurrido si Neville Chamberlain, el premier británico hasta 1940, no hubiera cedido Checoslovaquia al Reich en el acuerdo de Munich un año antes. Las potencias occidentales, básicamente Francia y el Reino Unido, firmaron su propia sentencia de muerte al emascular a los checos, que tenían las mejores defensas del este europeo. Eso permitió que Hitler entrara en Polonia como de paseo, sabiendo que no iba a tener ninguna oposición del este -había firmado un pacto con Stalin semanas antes- y tampoco del cobarde oeste.

La resultante Segunda Guerra Mundial duró seis años. El país que sufrió más que cualquier otro fue Rusia, invadida por Hitler después de que él deshizo el pacto con Stalin que había firmado meses antes. Con las tropas alemanas en las puertas de Moscú en diciembre de 1941, Rusia recapacitó y lentamente, con pérdidas de millones de hombres y mujeres, causadas por "purgas" internas, fue recuperando territorio, metro por metro, con ayuda material de Estados Unidos. Con las gigantescas batallas de Stalingrado (1942-43) y Kursk (1943) la Unión Soviética cerró la invasión de Hitler y selló el destino de Europa del Este por muchas décadas.

Los historiadores occidentales se centran en las grandes batallas en Europa occidental, sobre todo la invasión de Francia el día D del 6 de junio de 1944 y la guerra de Estados Unidos contra Japón en el Pacífico. Con mucha razón, sin duda. Pero si Rusia no hubiera mantenido a Hitler ocupado por tres largos años, es muy probable que el resultado de la guerra hubiera sido muy distinto y la historia de Europa también lo hubiera sido.

Se cierra el telón y vamos adelante 70 años. Según muchos comentaristas estamos en la peor recesión desde los años 1930-35. Mentira, dice mi amigo Allan Meltzer en un reciente artículo en el Wall Street Journal. Muestra las cifras siguientes:

Meses de receso Caída PBI Producción Industrial Tasa máxima desempleo

2007-2009 18 -3.8% -16.9% 9.5% (PPK 10%)

1937-1938 13 -18.2% -32.4% 20.0%

1973-1975 16 -15.3% -15.3% 9.8%

1981-1982 16 -12.3% -12.3% 10.8%

Según él, los programas anticrisis de estímulo al consumidor han tenido poco o nulo efecto. Las acciones de la Reserva Federal han generado desconfianza en los consumidores, sobre todo el abandono del banco Lehman Brothers hace exactamente un año y el crecimiento de la base monetaria por un "maquinazo" de más de US$1 trillón norteamericano (o US$1,000,000,000,000,000). El hecho es que la recesión se está acabando, aunque lentamente. Y así como hubo errores garrafales de política que nos llevaron a la Segunda Guerra Mundial, en el manejo de esta última coyuntura también ha habido graves errores de manejo, aunque es demasiado temprano para escribir esta historia. Para el Perú, lo mejor que podemos hacer en medio de este revuelo es, como dijo Voltaire, "cultivar nuestro jardín".

martes, 1 de septiembre de 2009

Carta de Chimbote


Estuve hace poco un par de días en Chimbote, la principal ciudad industrial del norte del Perú. Me invitó la Universidad Los Ángeles de Chimbote donde ofrecí una conferencia y luego participé en un divertido concierto en el que cantó la soprano lírica Verónica Electo y el niño Cristian Agüero, tocaron Daniel Cortés y Gerardo Chávez y el trío de cuerdas de Hernán Valdivia a quienes acompañé con un par de piezas de flauta. La noche anterior estuvimos en la catedral de Nuevo Chimbote (población 220,000 hab.) y luego fuimos con su dinámico alcalde Valentín Fernández y nuestro anfitrión Juan Armijo y los miembros de la Sociedad Cívica Chimbotana al restaurante del gaucho Zubzuck, ex arquero de la U, donde el niño Leonardo Estrada, quien nació ciego y es prodigioso en el teclado, nos tocó unas lindas melodías.

Aparte de estos divertimientos musicales, me llevo la impresión, después de varias visitas a universidades en todo el país, que nuestra juventud universitaria esta mucho más optimista que hace diez años. Su principal preocupación es cómo va a ir la economía y su participación futura en ella; esa impresión viene no sólo de universidades privadas sino también de las estatales, tales como San Marcos, la Agraria, Huamanga, y universidades nacionales en lugares tan diversos como Arequipa, Cusco, Piura, Pucallpa y Huancayo.

Obviamente la mejora económica relativa de los últimos ocho años, en todas estas ciudades, es la causa principal de este cambio positivo. Pero Chimbote parece haberse quedado atrás, aparte del optimismo que se ve en el sureño Nuevo Chimbote. Los dos grandes sectores industriales de la zona, la pesca y el acero, están golpeados. En el caso de la pesca, al amparo de las facultades legislativas delegadas, se estableció el año pasado un sistema de cuotas de pesca. Obviamente el objetivo de mayor eficiencia se está dando -si no pescas tu cuota, pierdes lo que no pescaste- pero en el camino hay perdedores, sobre todo los operadores medianos y los servicios, tales como repuestos y mecánicos, que los abastecen. En cierta medida, parte de todo esto es inevitable, pero urge una presencia del gobierno para explicar un poco las cosas. De otra manera, se puede crear un ambiente de presión bastante disconforme.

En el caso del acero, la crisis internacional ha afectado negativamente la venta y producción de acero nacional: en enero y febrero de este año la venta de acero nacional había caído casi 80% con respecto a la cifra a mediados de 2008. Ahora ha habido una recuperación parcial pero todavía estamos 40% por debajo del año pasado, igual que en el resto del mundo. La privatizada Siderperu ha reducido puestos de trabajo y ha anunciado una reconstrucción del alto horno, que esta parado por el momento. Gerdau, la brasilera dueña de Sider, esta cumpliendo el programa de inversión anunciado en el momento de la privatización, pero obviamente esta muy lejos de cumplir las infladas expectativas que anunció en 2007. Se debe explicar más claramente porque el "revamping" del alto horno no ha podido absorber por el momento los trabajadores excedentarios, como ha ocurrido en el pasado en países tan diversos como Argentina Y México. Aquí también es importante la presencia del estado con la alta dirección de la compañía.

Finalmente, varios problemas complejos de la región Chimbote siguen sin resolución, tal como la irrigación Chinescas al pie del río Santa. La carretera Casma-Huaraz, iniciada en el gobierno anterior, aún no está terminada. La situación le parece paradójica a los observadores locales, dados los ingentes recursos del Canon Minero que tiene acumulados la región Ancash -claro esta que éstos no se podrían utilizar en una vía nacional sin cambios legislativos.

Chimbote necesita que las autoridades de Lima le presten más atención.

lunes, 31 de agosto de 2009

Retorno a la Infancia


Hace algunos días me reencontré con mi infancia. Ocurre que visité el pintoresco puerto de Chimbote, donde vine a compartir con su cariñosa gente y a entregarles un poco de mi oficio como profesor y músico. Su paisaje me hizo sentir que el tiempo no había pasado. Recordé, mientras esperaba una habitación en el Hotel Chimú, que hace muchos años pasé unas vacaciones en ese mismo lugar junto a mi madre y a mi hermano, y que fue ahí donde mi mamá me regaló mi primera flauta, que luego crearía mi pasión por la música.

Al llegar a la habitación, descubrí que las coincidencias seguían en aumento, pues en ese mismo cuarto, hace décadas, había abierto el paquete que contenía la flauta e hice algunas notas siguiendo el manual de instrucciones.

Luego ocurrió otra extraña coincidencia. Mi visita a Chimbote fue motivada por el amigo Juan Armijo de la Asociación Cívica Chimbotana, quien pose la única tienda de instrumentos musicales de esa ciudad. Y ocurre que descubrí que esa tienda la heredó de su madre y que fue ella quien a su vez le habría vendido a mi mamá aquella primera flauta de mi infancia. Como para no creerlo.

Por otro lado, disfruté de la maravillosa vista del mar y sus islotes blancos, incomparables, descansando en el paseo que está frente al hotel, mientras veía que en la fachada de la Universidad Católica de Los Ángeles había un afiche que anunciaba mi conferencia económica y otro que invitaba a escuchar el pequeño concierto de música clásica que ofrecería en unas horas más.

Finalmente llegó la hora de mi concierto, al que asistí junto a mi cuarteto de cámara. Pero no fuimos los únicos invitados y tuvimos el privilegio de compartir con destacadísimas voces de la zona, como la joven soprano Verónica Electo, y el niño Cristián, conocido como el Ruiseñor de Trujillo, además de varios profesores que presentaron su arte musical. Junto a la gente de Chimbote compartimos una velada inolvidable, llena de alegría y entretenimiento.

Frente a mi partitura, interpretando música en Chimbote, sentía que el círculo estaba completo.

Gracias a todos los amigos de Chimbote, los llevo en mi corazón.

martes, 25 de agosto de 2009

Conociendo Caral


El símbolo turístico del Perú es Machu Picchu, conocido mundialmente. Pero hay otros monumentos, que vale la pena promocionar, entre ellos Kuélap, Choquequirao, y el sitio arqueológico de Caral, ubicado tan solo a 180 kilómetros al norte de Lima. Es el sitio recomendado para quienes quieran conocer una civilización que existió hace casi cinco mil años, mucho antes que la cultura Chavín, Wari, Chimú/Mochica, Nazca, Chancay y el propio Incanato- al pie de los Andes en la costa norte cercana a Lima (el “Norte Chico”).

Tuve la suerte que Ruth Shady, la conocida arqueóloga que ha dirigido los trabajos en Caral desde los inicios hace quince años, organizara un equipo de sus colegas arqueólogos para darnos explicaciones didácticas. Hay muchos aspectos fascinantes que se desprenden de una visita aún breve a Caral. El primero es la arqueología viviente que se experimenta allí: los diversos montículos y túmulos, que se divisaron vía fotografía aérea hace unos cincuenta años, hoy están siendo activamente explorados y reconstruidos, un proceso sumamente laborioso y fascinante. Hay pocos sitios en el mundo en los cuales uno puede ver un proceso arqueológico en plena elaboración.

Segundo, hay que recordar que la civilización que se arraigó en Caral a lo largo de unos 800 años (alrededor de 2,800 A.C. a 2,000 A.C.) es una de las más antiguas de la historia, excedida en su antigüedad sólo por las civilizaciones de Mesopotamia (hoy Irak). Los habitantes de Caral eran agricultores y comercializaban sus productos agrícolas contra pescado de la costa (hay restos de anchoveta), que queda a unos 25 kilómetros del sitio central en Caral. Conocían el círculo –hay dos anfiteatros ya excavados, ambos perfectos círculos.

Tercero, los métodos de construcción eran bastante especiales, con una mezcla de piedra con mortero. Este mortero provenía de arcilla elaborada y sacada de canteras especiales: el mortero en muchos lugares ha mantenido su fuerza por más de 4.000 años. Parece que los gobernantes de Caral estaban empeñados en reconstruir periódicamente sus pirámides y monumentos. Hay ruinas construidas sobre otras ruinas, en una especie de modernización constante. Uno de los anfiteatros, por ejemplo, incluye un segundo anfiteatro más pequeño y más reciente, construido al interior del primero.

Caral es un esfuerzo totalmente peruano, con un grupo de arqueólogos de gran dedicación y entusiasmo, que trabajan con recursos muy escasos; hay poca presencia significativa de arqueólogos de las grandes universidades extranjeras. El potencial turístico apenas está siendo explotado. Hay pocos visitantes del exterior o incluso de Lima; la mayoría de visitantes son estudiantes y colegiales de la zona de Huacho, Barranca y Pativilca. Es evidente que Caral es una joya que debe ponerse en el circuito del alto turismo cultural, dada su proximidad a Lima, en un valle de gran belleza natural, un trozo de la historia de toda la humanidad.